Semblanza

¿Qué tal si por un momento viéramos a la vida como un partido de basketball?
Pensemos primero en los elementos que necesitamos para poder jugar. Necesitamos de un equipo, un entrenador, la duela, árbitros, pero para poder disfrutar del partido necesitamos pasión y entrega para que en cada momento del juego des siempre lo mejor de ti. 

Como estamos pensando en nuestra vida como un partido de basketball, así es como les describiré la mía. Comencemos por mi equipo, así como en un partido de baskteball necesitas de 5 jugadores en la cancha, así esta formado mí equipo, se estarán preguntando de quiénes estoy hablando, pues mí equipo es mi familia.
Un equipo debe confiar en cada miembro para poder ganar un partido, debe de entender que las debilidades de un miembro son las fortalezas del otro y qué entre todos se complementan. Debes aprender a comunicarte para que una jugada funcione.
Así es mi familia, son las personas en las qué mas confío y hemos aprendido que es mejor caminar juntos, que separados y qué aunque a veces haya problemas, siempre es mejor resolverlos hablando. 

"Nosotros amamos a Dios porque él nos amó primero" 1 Juan 4:19

Seguramente se estarán preguntando por qué les puse este versículo, así como habíamos mencionado antes, para un partido necesitas de un entrenador. ¿Pero cuál es el objetivo del entrenador?¿Por qué tiene tanta importancia? Pues un entrenador es aquel quien guía al equipo, quién sabe que jugadas hacer, a quién preguntas por consejo. 

Dios es el entrenador de mi vida, quién guía mis pasos y quién día a día me muestra a donde me quiere llevar. Dios es a quién puedo acudir cuando tengo preguntas, cuando estoy triste y es quién trae consuelo a mi vida. 

Sin duda el amar y seguir a Cristo es la mejor decisión de mi vida. 

Les dejó esta canción que me gusta mucho:  No longer slaves

"En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y envió a su Hijo para que fuera ofrecido como sacrificio por el perdón de nuestros pecados"

1 Juan 4:10

Tenemos que mencionar qué para poder tener un partido, necesitamos una duela. La duela es el lugar en dónde se desarrolla el partido, cuándo estas dentro ya no hay retorno,  es el lugar en donde todo tipo de emociones llegan a ti, emoción, miedo, impaciencia, pasión, entrega. La duela es sin duda el lugar donde más aprendes.
                   En mi caso, mi duela fue el basketball, por eso es que estamos comparado nuestra vida como un partido. Durante 13 años tuve la oportunidad de jugar este maravilloso deporte y lo mejor es que todo ese tiempo lo hice portando la misma camiseta. Sin duda esto me enseñó la lealtad y la fidelidad.                                                                                                                                       Como olvidar cada segundo dentro de la cancha cuando el juego iba tan cerrado, o cada golpe por ganar un rebote o aquellos largos viajes en camión.  El deporte no solo me enseño disciplina y esfuerzo, me mostró a muchas personas que se volvieron mi familia, con las que pasé lágrimas después de una derrota, pero también gritos y abrazos después de un partido ganado.

La experiencia que más me marcó en este deporte fue hace un año y medio cuándo estaba jugando mi última temporada y tuve una lesión en la espalda. Jugué lesionada aproximadamente 4 meses hasta que un día después de un partido ya no podía caminar. Fue una lesión difícil porque cuando llegué a que me checaran la doctora me dijo que podía haber dejado de caminar por no haberme checado a tiempo y me dijeron que tenía que dejar de jugar por 1 año. No se si han pasado por una situación así pero imaginen estar en su última temporada y que de pronto no van a poder terminarla, fue difícil pero me mostró que cuándo se quiere algo, se entrega por completo y se esfuerza y da lo mejor para alcanzar sus objetivos. Y aún a pesar de mi lesión únicamente dejé de jugar 2 meses y pude terminar de jugar mi última temporada. 

Les dejaré esta frase que me gustó mucho ya qué describe como es la vida de un atleta y abajo un vídeo que hice en mi último torneo: Here's the end

                                                                                                                                                                                      "One day you won't be an athlete anymore. You won't have those long bus rides with your teammates. You won't have those bruises all over your body. You won't have that routine you do before every game. Your teammates will become distant and your laughs will become limited. Eventually, the one thing you looked forward to will come to an end. The one thing you relied on to relieve your stress and allow you to escape from your problems won't always be there. One day, you won't be an athlete, you will just have the memories of one".

Finalmente  están los árbitros quienes durante un partido son los encargados de que se cumplan las reglas y en buscar lo mejor para ambos equipos dentro de la cancha.

Sé que esto no es un arbitro en mi vida pero quiero que a través de esto pueda ser un árbitro en la vida de otras personas.

 Hace 3 años tuve la oportunidad de ir de  misiones  a una comunidad popoloca ubicada  en San Martín Esperillas,Puebla, en donde pude observar que estas personas no tienen la educación necesaria para salir adelante ya que los niños aproximadamente de 6 años en adelante, empiezan a trabajar dejando los estudios aún lado. Les dejaré un link en la parte de abajo para que puedan estar mejor informados de la situación en este lugar. 

San Martín Esperillas, Puebla.

En algunos años me gustaría abrir una organización no gubernamental que mediante el deporte pueda ayudar a niños con escasos recursos a poder alcanzar una mejor educación y nuevas oportunidades  y me gustaría empezar el proyecto en ésta comunidad.

Y así como los árbitros busca qué no se cumplan faltas y lo mejor para los equipos, espero que ésta organización sea esto para los niños una forma para que ellos encuentren un mundo con igualdad de oportunidades.

Finalmente me gustaría dejarles como reflexión que así como en un partido necesitas pasión y entrega para disfrutar del juego, lo mismo es en tu vida. En un partido puedes ir empatado, puedes ir perdiendo o incluso ganando pero depende de ti de como afrontes cada situación, si decides dejarte vencer o decides luchar y esforzarte por alcanzar el objetivo y si vas ganando depende de ti si decides quedarte ahí o aumentar la ventaja. En cada cosa que hagas, deja lo mejor de ti y no te quedes en tu estado de confort, disfruta tu vida como si estuvieras jugando un juego.